sábado, 25 de julio de 2009

Un sueño (TMVHEPT2UCIHBWFYFTL)

Me encontraba un poco nerviosa. Con serias dudas acerca de mi cordura. ¿Realmente estaba ocurriéndome esto? ¿Realmente te vería allí?

Estaba tratando de encontrar tu rostro entre tanta gente que caminaba por ahí ese día.
Ya me estaba desesperando. No porque tu llegues tarde, sino porque yo tengo poca paciencia. Decidí llegar antes de lo acordado porque no quería ningún contratiempo. Realmente tenía muchas ganas de verte. Cada minuto que permanecía sentada en esa pequeña banca me parecía eterno. Incrementaba la adrenalina que corría en mi sangre. Mi estómago sentía una sensación extraña. No aguantaba el deseo de verte. ¿Qué aspecto tendrías? Algo que seguramente permanece por siempre es tu mirada... . Esa mirada, tan distinta de cualquier otra. La que atraviesa el alma, mi alma. Seguro que esa mirada tuya te descubriría para mi. Estaba segura que lo haría. Estaba segura que distinguiría tu rostro en un millón. Aunque estuvieras...

¡Un momento! Te vi, te vi, ¡te vi! ¡Hey! Aquí estoy. ¡Mírame! ¡Ay no! ¿te vas? No puedes irte así como así, sin saber que yo estoy aquí, que estoy esperando por ti. Esperando tanto tanto tiempo por ti. ¿Porqué? ¿Porqué veniste tan rápido y te fuiste así? No me miraste, no me hablaste. Estas cruzando la calle y te estas alejando. Comienzo a experimentar olas de emociones altas y bajas, muy altas y muy bajas. No, no, no. Si no corro hacia ti, te irás de aquí y yo me quedaré sin conocer tu mirada. Empiezo a gritarte. Pero no me escuchas. Mis piernas se sienten pesadas, amarradas al pavimento, quiero correr hacia ti, quiero decirte que allí estaba, lista, esperando por ti. Pero mis piernas no responden, no puedo correr. Y mi voz se ahoga en mi garganta. ¿Porqué? ¿Qué me está pasando? ¿Qué es lo que no me deja correr hacia ti? ¿Qué es lo que ahoga mi voz? Me siento desesperada. Había soñado este momento. Me sentía preparada para vivirlo. Y estabas ahí, te reconocí. ¿Porqué te fuiste? ¿Porqué no me esperaste? ¿Porqué no me buscaste más? ¿Acaso estabas jugando conmigo?

Sé que eras tú. Sé que estuviste allí, pero no esperaste por mi ¿Porqué te fuiste? Ni siquiera me dejaste acercarme...

¿Cuándo te volveré a ver? ¿Cuándo te voy a volver a encontrar? ¿Cuándo podré estar cerca de ti? ¿Cuándo podré preguntarte tantas cosas que quiero saber desde hace tanto tiempo?


TMVHEPT2UCIHBWFYFTL

Abro mis ojos. No estoy en el parque. Estoy en mi cama. Fue un sueño. ¿Lo fue?

miércoles, 15 de julio de 2009

Tan cerca, tan lejos

Tan cerca estuve de ti y aun así tan lejos... nunca supe acortar esa distancia. Me sorprende la lejanía que puede poner entre dos personas una actitud fría y el orgullo en todo su apogeo.
Yo siempre te he querido. Eres mi sangre. Y cuando sufres, me duele. Y cuando estas contento, me alegro. Cuando te hacen daño, me ofendo. Y cuando caes, quiero levantarte. Pero todo eso que siento y que hubiera querido hacer por ti, no pude hacerlo. Creo que tu orgullo y el mío no pueden estar juntos en el mismo lugar.

Si tan sólo pudiera decirte lo mucho que te quiero...
Lo mucho que me importas. Lo mucho que me preocupa que estes bien y que te vaya bien...

Una promesa si te hago, si tu no te despojas pronto de tu orgullo para decirme lo que hay en tu corazón para mi, yo si me voy a despojar del mio. Porque yo no puedo aguantarme las ganas de hacerte saber cuanto me importas. Cuanto te quiero y lo mucho que deseo tu bienestar. Aunque seas un cabeza dura, necio, terco y con serios problemas mentales. Te quiero, y me duele haberme enterado de lo que me enteré ayer. Y quisiera hacer algo por ti y se que no puedo.
No me has dicho nada. Por no querer "aguarme la fiesta". O porque no tienes la confianza de decirmelo. O porque eres orgulloso. Pero ya lo se. Y aunque no sabes que se, estoy contigo.

Te quiero montones. Y tambien te quiero golpear por burro.

Espero poder decirte esto de frente, pronto.

sábado, 4 de julio de 2009

Lo que aprendí aquí

Pensando en lo que he vivido aquí en T.B.C, y ahora que estoy a punto de regresar a mi querida P.D.L.A siento la necesidad de poner por escrito parte de mi aprendizaje aquí como evidencia de toda esta experiencia que definitivamente me ha marcado y que se convirtió en parte de mi desde 200207. Así que esta entrada pretende ser un condensado de notas de aprendizaje en mi vida, durante mi estadía "aquí":

Arriesgarme para alcanzar algo

Si bien es cierto que un riesgo es un albur, con certeza puedo decir que atravesar por todo lo que conlleva tomarlo resulta en muchisimo crecimiento y aprendizaje. Aún saliendo victorioso, pero mucho más, si no lo haces.

Viviendo sola

Vivir sola me permitió valorar y revalorar lo que tenía y lo que tengo. Nació en mí un profundo agradecimiento hacia mi madre (el amor siempre ha estado ahí), por todos los gestos de amor que tuvo y tiene para mí.
La experiencia de vivir sola también me enseñó a organizar y economizar mis recursos. No sólo el dinero pero mi tiempo y mi esfuerzo. Aprendí a separar y no tocar los gastos fijos. Aprendí a llevar un calendario de pagos.
Aprendí que el quehacer de una casa no se hace solo y que es mucho más fácil y menos cansado hacerlo de a poco diariamente, que de a mucho pero de vez en cuando jejeje.
Aprendí que es importante tener velas, linterna y pilas en caso de una emergencia. Aprendí que llevar una buena relación con los vecinos siempre es beneficioso.
Aprendí que hay que mantener una despensa básica en la alacena. y siempre algo que ofrecer de comer en el refrigerador, cuando recibes visitas inesperadas.
Aprendí que la mano fuerte de un hombre es necesaria y en ciertas ocasiones hay que pedirles ayuda (aunque eso me sigue costando trabajo).
Aprendí que la soledad no es buena compañía pero sí buena maestra. No estamos hechos para vivir solos. Estamos hechos para estar con los demás, para aprender de otros y para dar de lo que nosotros somos a los demás. Aprendí que las bendiciones que Dios da saben mejor si se comparten con otros. Aprendí a extrañar...

Trabajo, sus penas, frustraciones y las recompensas.

Evidenciar la inexperiencia puede y será causa de burlas por los compañeros de trabajo. Pero no hay que preocuparse. A todos les llega el turno de equivocarse y ser la causa de la risa. Y si no les llega, entonces llega otro novato a hacer de las suyas, jejeje.
Los jefes siempre encuentran la manera de obligarte a hacer lo que ellos quieren, aún cuando tu propuesta de solución sea mejor, si ellos no están convencidos, no se hace.
Los vínculos románticos entre personas que trabajan en la misma empresa son complicados y nada recomendables.
Evitar conflictos con los compañeros de trabajo es lo mejor que uno puede hacer, pero si los tienes, aclarar las cosas y finalizar en paz es lo mejor.
No importa cuanto le expliques al jefe lo que tardará un proyecto en realizarse. Si éste ya se comprometió con el cliente, ya te amolaste...
Mostrar respeto hacia las personas habla bien de ti :)
El baño es (fue) un buen refugio para "chillar". Pero antes de salir, uno se limpia bien las lágrimas, se moja la cara, se acomoda bien la ropa, sale y como si nada. A seguir trabajando.
No importa que tan bueno seas en lo que haces, algún día te equivocarás y se debe estar preparado para la "san juaneada" y para resolver lo que se tenga que resolver.
Pude ver con mis propios ojos que la apariencia física y la presentación de una persona sí tiene impacto en el sueldo, puesto y trato que la gente tiene hacia alguien.
Pero dar lo mejor de ti en lo que haces siempre trae mucha satisfacción, mucho aprendizaje y aumentos de sueldo :)

Por último
Ubicarme en las calles de esta ciudad fue todo un reto para mí. Soy mala para eso. Pero aprendí a preguntar. Si no se llegar o conozco un lugar pregunto y ya.
Aprendí los regionalismos de aquí. Aprendí el acento de la gente de aquí. Aprendí que resulta mucho más raro encontrar a alguien que haya nacido aquí en T.B.C que encontrar a alguien que venga de cualquier otro lugar del país.
Conocí un poco esta ciudad. Conocí sus principales municipios. Hay que reconocer que no es muy bonita en varios términos como por ejemplo la vista y el grado de delincuencia que tiene. Pero me llevo en el corazón todo lo bueno que Dios me enseñó a través de mi estadía aquí.
Me llevo en el corazón a mis compañeros de trabajo, a los amigosy personas especiales que pude conocer aquí de los cuales aprendí tanto. Debo reconocer que me costó mucho estar aquí, y sí lloré, y sí me confundí pero hoy más que nunca estoy agradecida con Dios el haberme permitido vivir esto, porque pude madurar un poco. Definitivamente no me voy como llegué. No me voy con cosas materiales (las tuve que vender y deshacerme de ellas me costó trabajo). Pero me voy con mucho más que cosas materiales. Me llevo mis experiencias. Me llevo mi aprendizaje. Me llevo mis vivencias. Me llevo mis lágrimas. Me llevo una actitud distinta. Me llevo la situada de pies en la tierra. Me voy así... con los pies en la tierra, pero con mis mismos sueños y anhelos, pero sobre todo un deseo inmenso de cumplir el propósito de Dios en mi.

Buenas noches!